Igual que cuando llegue el invierno hablaremos de los resfriados y en primavera de las alergias, el verano es para hablar de gastroenteritis aguda (GEA). No es que sea un tema muy agradable, pero si lo sufrimos con tanta frecuencia en esta época del año que merece la pena saber la pauta de actuación.
En verano se producen cambios de entorno, temperaturas, hábitos alimenticios, etc. que pueden contribuir a un cambio en el ritmo intestinal. Además, la gastroenteritis aguda es provocada por un agente infeccioso (virus, bacteria), cuya aparición puede estar provocada por viajar a regiones con un estado sanitario no satisfactorio (diarrea del viajero), estar en contacto con animales o con otras personas que estén sufriendo el proceso.
Cursa con distintos síntomas, siendo los más comunes: diarrea (heces líquidas y muy frecuentes), nauseas y vómitos, febrícula o fiebre, dolor abdominal y gases.
Uno de los mayores riesgos, sobretodo en niños y ancianos en esta época del año, es la deshidratación, por eso las medidas de tratamiento deben ir encaminadas a evitar la misma.
MEDIDAS EN LA GEA
El objetivo principal es la rehidratación del enfermo. Para ello existen preparados comerciales en farmacia (sueroral) muy eficaces o se puede preparar de forma casera la limonada alcalina: a 1 litro de agua hervida se le añade el zumo de 2 ó 3 limones, media cucharilla de bicarbonato, media cucharilla de sal y 2 ó 3 cucharadas de azúcar.
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| La limonada alcalina se puede elaborar de forma casera |
Durante las primeras 4-6 horas se debe realizar dieta absoluta de sólidos y líquidos y dejar reposar el aparato digestivo.
El comienzo de toma de líquidos se debe hacer de forma pausada: una cucharada cada 5 minutos hasta ver si se tolera sin vomitar. Se debe seguir con pequeñas cantidades de líquido paulatinamente sin forzar.
Tras 24 horas en dieta líquida únicamente, comenzaremos a probar la tolerancia de sólidos con una dieta blanda astringente: sopa de arroz, puré de patata y zanahoria, pescado hervido, pollo sin piel a la plancha, arroz blanco, manzana asada, etc. Se deben evitar de manera especial los lácteos, frituras, verduras crudas, salsas, azúcares y bollería, bebidas frías y café.
Se debe prestar especial importancia a la presencia de fiebres elevadas y sangre en heces.
En general, es un proceso leve que cura en un periodo de 2-5 días sin mayor gravedad y sin secuelas, pero que se debe vigilar con especial cuidado en individuos más sensibles (enfermos, niños, lactantes y ancianos) y acudir al médico ante la presencia de empeoramiento de síntomas o aparición de nuevos.
Foto: photo credit: <a href="http://www.flickr.com/photos/frabisa/7832741696/">Frabisa</a> via <a href="http://photopin.com">photopin</a> <a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/2.0/">cc</a>
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