25 de junio de 2013

Viaja seguro

Dentro de pocos días llega el mes de julio y con él, los primeros desplazamientos en masa para disfrutar de las vacaciones. Antes de decidir qué meter y no meter en la maleta, debemos de preparar el botiquín de viaje que siempre debemos llevar cuando salgamos de casa por algunos días.

El botiquín de viaje veraniego debe contener apósitos y gasas, analgésicos, antiácidos, antidiarréicos, protectores solares y repelentes, según indican los expertos de la Asociación para el Autocuidado de la Salud (Anefp) con motivo del comienzo de la temporada estival. Si además somos de los que lo pasamos mal en los viajes debido a los mareos, debemos de tenerlo en cuenta para llevar fármacos contra el mismo siempre que vayamos a realizar algún desplazamiento.

Antes de que lleguen los días previos al viaje, debemos de tener en cuenta también los posibles tratamientos médicos crónicos que nosotros o cualquier miembro de nuestra familia tome. Lo ideal es que llevemos suficientes dosis de medicamento para que nos duren toda la estancia fuera de nuestra residencia habitual, para no tener que acudir a consulta para la renovación de recetas en otro centro de salud que no sea el nuestro (hay medicamentos que suponen un coste elevado sin receta médica). Además, debemos de viajar siempre con nuestra tarjeta sanitaria y un informe de nuestro médico de Atención Primaria donde se indiquen nuestras patologías y los tratamientos que estamos tomando en el momento actual. 


Para viajes al extranjero la preparación de nuestro botiquín de viaje debe comenzar con mayor antelación.
La Tarjeta Sanitaria Europea se trata de un documento gratuito que permite acceder a la atención sanitaria pública —necesaria por motivos médicos— durante una estancia temporal en cualquiera de los 27 países de la UE, además de Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza. Se puede solicitar  en la sede electrónica de la Seguridad Social y tarda aproximadamente 10 días en ser enviada al domicilio del solicitante, por lo que debemos hacerlo con antelación suficiente. Hay que tener en cuenta que los sistemas sanitarios de cada país son diferentes: los servicios que en nuestro país son gratuitos no tienen que serlo en otros. La tarjeta sanitaria europea NO es una alternativa al seguro de viaje. No cubre la asistencia sanitaria privada ni costes tales como el vuelo de regreso al país de origen. 

Siempre deberíamos de informarnos sobre la posibilidad de contratar un seguro médico de viaje, observando bien las coberturas: un simple antihistamínico en el extranjero puede suponer un desembolso importante de dinero. 
Otra recomendación antes de viajar al extranjero es consultar si puede ser recomendable la administración de alguna vacuna. El Ministerio de Sanidad informa sobre las vacunas necesarias en cada país extranjero y como viajar más seguro.

Espero que estos consejos os sirvan de ayuda y que los tengáis que poner en práctica pronto...eso significa que sí que os vais de vacaciones.




Foto: photo credit: <a href="http://www.flickr.com/photos/marcp_dmoz/3955923726/">marcp_dmoz</a> via <a href="http://photopin.com">photopin</a> <a href="http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/2.0/">cc</a>

2 comentarios:

  1. Como siempre te digo... fenomenal! Siempre habrá de los que el primer día que llegan de vacaciones se van al médico a por las correspondientes recetas y claro.. luego vienen las movidas, por eso mejor prevenir si señor.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo dices por alguien? jajaja es que buena gana de tener que andar mareando cuando als olución es tan sencilla. Acudir al médico sí, pero cuando es necesario.

      Eliminar